El salario es uno de los factores más determinantes al solicitar un préstamo. Las instituciones financieras lo utilizan para medir la capacidad de pago de los solicitantes, lo que afecta directamente sus posibilidades de aprobación y los términos ofrecidos. Este análisis, basado en datos de solicitudes de préstamos a través de PréstamoJusto en noviembre de 2024, examina cómo diferentes niveles de ingresos influyen en las aprobaciones de préstamos.
Ingresos mensuales: una barrera clave
La mayoría de los solicitantes pertenece a grupos con ingresos mensuales bajos, especialmente en el rango de 1.000 a 2.000 euros.
Este grupo domina claramente el mercado, mientras que las personas con ingresos superiores a 6.000 euros representan una minoría casi simbólica.
Este desequilibrio muestra cómo las necesidades financieras más inmediatas, como cubrir gastos básicos o consolidar deudas, son más prevalentes en segmentos de menores ingresos.
Sin embargo, este grupo enfrenta mayores desafíos para acceder al crédito debido al limitado margen de maniobra económica que presentan.

La estabilidad laboral como garantía
El empleo fijo es una característica predominante entre los clientes que solicitan préstamos, representando una mayoría significativa en comparación con otros tipos de empleo.
Este dato refuerza la importancia de la seguridad laboral como un factor crucial en la aprobación del crédito, ya que quienes tienen ingresos regulares son percibidos como menos riesgosos por las entidades financieras.
Por otro lado, sectores como los estudiantes o trabajadores temporales se encuentran en desventaja, lo que pone de manifiesto la necesidad de ajustar las políticas crediticias para incluir perfiles más diversos.

El impacto de la región geográfica
Regiones como Cataluña, Andalucía y Madrid concentran la mayor parte de las solicitudes de préstamos.
Esta concentración no solo refleja su densidad poblacional, sino también su dinamismo económico, lo que genera una mayor demanda de crédito.
Las regiones más pequeñas, en contraste, aportan una proporción menor de solicitantes, lo que sugiere una menor accesibilidad o necesidad en estas áreas.
Estas diferencias regionales son indicativas de cómo el contexto económico local puede influir en el comportamiento financiero de los clientes.

El propósito del préstamo según el perfil del cliente
Los datos revelan que los clientes tienden a solicitar préstamos para fines generales, categorizados como «otros», así como reparaciones del hogar o consumo.
Este comportamiento refleja las necesidades más comunes de las personas que buscan financiamiento, relacionadas con cubrir gastos imprevistos, mejorar sus condiciones de vida o mantener un nivel de consumo estable en momentos de restricción económica.
Estas prioridades sugieren que los préstamos se perciben como una herramienta clave para afrontar desafíos financieros cotidianos, al tiempo que permiten a los clientes equilibrar sus presupuestos y planificar a corto plazo.

Conclusión
La influencia de los ingresos mensuales en las probabilidades de obtener un préstamo es clara. Las personas con ingresos más bajos representan una mayoría en el mercado, pero enfrentan barreras adicionales debido a su menor capacidad económica. Sin embargo, factores como la estabilidad laboral y la ubicación geográfica también desempeñan un papel determinante en el acceso al crédito.
El futuro del sector financiero pasa por reconocer la diversidad de perfiles económicos. Adaptar las soluciones crediticias a las realidades de los clientes es clave para impulsar un crecimiento inclusivo y sostenible.
Andreas Linde, CEO de PréstamoJusto.
En última instancia, para promover un acceso equitativo, las entidades financieras deben ir más allá de los ingresos como único criterio y considerar el contexto integral del cliente, desde su estabilidad hasta su lugar de residencia y objetivos financieros.